sábado, 25 de enero de 2014

The Sadies funden La Lata de Bombillas

He de confesar que hasta hace relativamente poco tiempo no conocía a The Sadies, en mi defensa alegare que entre tanta música y grupos no hay ser humano que pueda seguir la pista a todos. Pero gracias al amigo Luispe y a Hotel Arizona pude conocer a la interesante banda canadiense de los hermanos Good.
Dentro de la extensa gira que les ha traído a España, ayer tuvimos la suerte de tenerlos en Zaragoza y más concretamente en “La lata de bombillas”, esa pequeña sala que entre sus muchos defectos (el minúsculo escenario que apenas levanta un palmo del suelo y una pobre acústica serian algunos de ellos) tiene como virtudes la de programar buenas actuaciones constantemente y que por lo reducido de sus dimensiones da la impresión de estar en un concierto privado.


Podría escribir alguna línea sobre The Underdogs, los teloneros, pero dejémoslo en que perdí interés por ellos en la tercera canción. Tras la breve actuación de estos, saltaron a escena The Sadies para dar un concierto de esos que yo suelo definir como de rock, sudor y amplificadores humeantes. Recorrieron todos los palos del rock, sonido garaje, pasando por sus raíces country, la música surfera, se aproximaron en ocasiones al punk y evocaron pasajes de powerpop. De todo nos podemos encontrar en su música. Siempre me ha llamado la atención que las bandas Norteamericanas tienen el don de conseguir sonar bien en cualquier local y en este pequeño recinto de tan difícil acústica nos deslumbraron con un sonido claro y contundente.


No sabría calcular el número de canciones que tocaron, en su mayoría pertenecientes a su último álbum “Internal Sounds”, pero en la hora y veinte que estuvieron sobre el escenario fueron enlazando tema tras tema a una velocidad de vértigo para disfrute del público allí presente. Hasta dos veces tuvieron que volver al escenario ante los vítores del respetable pero en la última solo tocaron una canción de apenas 20 segundos con la que daban a entender “Venga, pesados iros a casa que nosotros mañana tenemos otro bolo de esta intensidad”.

Resumiendo, muy bien The Sadies que nos regalaron un concierto de esos que de vez en cuando todos necesitamos para recargar las pilas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario